Comunicación y Liderazgo


COMUNICACIÓN Y LIDERAZGO

En el diario accionar de las organizaciones modernas, es necesario establecer procesos comunicacionales efectivos y la coexistencia de diferentes estilos de liderazgo, lo que va a constituir un clima organizacional ideal para el funcionamiento adecuado del proceso productivo de la organización.
Antes de iniciar el análisis con respecto al video recomendado, es necesario establecer algunas definiciones que permitirán la fácil comprensión del tema a estudiar.  En cuanto a la comunicación se puede decir que esta es: “un proceso por el que los individuos interaccionan entre sí, mediante símbolos que representan información, ideas, actitudes y emociones con el fin de influirse mutuamente”.
Así pues se logra comprender que el proceso comunicación, desde la perspectiva más sencilla, es un proceso en el que se pretende transmitir una información mediante diversos canales, con el manejo de un código adecuado y comprensible, donde intervienen dos o más interlocutores.  Y precisamente, partiendo de los interlocutores, uno de ello debe fungir como líder del grupo, para hacer que la comunicación realmente fluya de la manera adecuada.  Por ello es conveniente establecer una clara definición del liderazgo.
Entonces, se comprende que el liderazgo es: “el arte o proceso de influir sobre las personas para que se esfuercen voluntaria y entusiastamente para lograr las metas de grupo”.  Con esta definición se pueden comprender que el líder de una organización debe estar en disposición de motivar al equipo de trabajo para alcanzar las metas establecidas.

Ahora bien, analizando el video sobre “El Juego de echar la culpa”, en este video se presenta una situación típica dentro de las organizaciones, donde se analizan los procesos de producción y ventas de la misma, y donde se dan cuenta que las ventas y los costos de producción van en deterioro de la productividad de la organización.
Resumiendo la situación planteada en este video, se observa una crisis económica dentro de la organización, basada en los disvalores reforzados por el estilo de liderazgo y la mala gestión comunicacional que existe dentro de ella, lo cual se ha revertido en un clima organizacional poco favorable al desarrollo productivo y sostenibilidad de la misma.
Pues, el proceso de comunicación es muy pobre dentro de la organización, no se establecen criterios de producción que permitan mantener una línea de acción pertinente y fortalecer el sentido de pertenencia hacia la organización; pues queda evidenciado en el desarrollo del video que cada trabajador sólo se dedica a hacer su función y no aporta un grano de arena adicional para hacer que el trabajo salga de la mejor manera, sino que se limita a lo que le corresponde.
Esa baja escala de sentido de pertenencia hace que, aunque se conozca el problema y su posible solución, no se aporten medidas que mejoren la situación de crisis ya que no está dentro de sus responsabilidades.  Aunado a esto, existe una evidente fractura en el proceso comunicacional, pues cada quien está en su área de confort, y no presta atención a las señales que se hacen evidentes en relación al declive de la efectividad de la organización.
En la organización presentada se aprecia con claridad, que la comunicación no es apropiada, no hay buena comunicación descendente, pues las órdenes de los superiores suelen no ser entendidas ni atendidas con la rigurosidad que se debe seguir; pero tampoco existe un flujo correcto desde los empleados hacia la alta gerencia, comunicación ascendente, pues éstos sienten que no son tomados en cuenta al momento de tomar decisiones ni en la más básica de las funciones comunicacionales como el reportar fallas en los procesos, y lo que es peor aún, entre los mismo empleados (comunicación horizontal) existe una comunicación adecuada. 
Pero la razón de esto, parte de un estilo de liderazgo implementado de forma inadecuada (laissez faire), donde los empleados tienen la libertad de trabajar por su cuenta bajo los esquemas establecidos, con la suficiente libertad de decidir sobre su labor en el departamento correspondiente, pero con una baja o ausente supervisión del líder o jefe de departamento, el estilo de liderazgo es insuficiente para dirigir a la organización al éxito y, peor aún, mantenerlo en él.

Por otra parte, la evidente existencia de grandes barreras comunicacionales a lo interno de cada sección de trabajo, y de éstas hacia la gerencia y a la inversa, aumenta la posibilidad de fracaso de la organización.  Dentro de las barreras de comunicación que se detectan en el caso presentado en el video se pueden apreciar barreras administrativas, ya que hay una serie de hecho no aclarados, información ofrecida en forma incompleta o mal orientada, poca atención a sucesos acaecidos en la organización; también se evidencian barreras psicológicas que impiden la aceptación de algunos cambios o la poca voluntad para realizar actividades extras en procura de que el proceso se desarrolle en total normalidad.
Ejemplo de ello se hace evidente en el momento que una de las máquinas de la línea de producción presenta un desperfecto, y la persona encargada del mantenimiento no se encuentra, por estar de vacaciones, y quien sustituye a éste temporalmente, dice claramente que esa no es su responsabilidad, y que nadie le prestará atención a esa situación.  Hecho que retrasa la producción y repercute directamente en la calidad del producto y el despacho y distribución del mismo.  Por lo que las ventas caen considerablemente y sin poder detenerlo.
Esta situación hace que los costos cada vez sean mayores y por ende las ganancias desciendan de manera considerable.  Pero como cada empleado estaba dedicado a hacer sólo su parte del trabajo, era más fácil culpar al otro de la situación, sin considerar que era corresponsabilidad de todos, y esto por falta de un liderazgo efectivo, que supervisara el trabajo de cada quien, en procura de un mejor ambiente de trabajo, y afianzamiento del proceso de identidad o sentido de pertenencia de los empleados y obreros.
Mientras todos se negaban a ver la solución, sólo una de las empleadas, libre de prejuicios y con suficiente voluntad de trabajo y alto sentido de compromiso con la productividad de la organización, eleva su voz para hacerles ver que la culpa no era del otro, sino más bien, era responsabilidad de todos, por no prestar atención a la necesidad del vecino.
Y es así, como justo en el peor momento de la crisis, y por la actitud positiva y carismática de la empleada Dora, quien les expresa la situación de comunicación fallida existente y que todos son corresponsables del fracaso de la organización, comenzó el proceso de aceptación de la necesidad de cambios para lograr las metas establecidas.
A partir de ese proceso de concienciación de la importancia de comunicación y supervisión de las acciones, se comenzó a producir una elevación del sentido de pertenencia y la motivación a hacer el trabajo y de ser parte de la solución y no del conflicto, y sólo a partir de ese momento, la organización comenzó a crecer de forma sólida y constante.
También es importante tomar en consideración en este análisis, lo trascendental de la motivación que debe ofrecerse al personal dentro de las organizaciones, las cuales no son solamente físicas, sino espirituales.  Pues el hecho de tomar en cuenta la opinión de los trabajadores en relación a los procesos e incluso a sus necesidades personales, actúa directamente sobre el sentido de pertenencia, y eso, a su vez, redunda en un proceso productivo más efectivo; pues un empleado no sólo requiere de bonificaciones, si no de reconocimiento de su actuación y ser considerado como ser humano y no como máquina.
En resumen, el video deja en evidencia la importancia de una comunicación efectiva y asertiva dentro de las organizaciones, pues de ello dependerá el éxito o fracaso de la misma, y también se reconoce la necesidad de un liderazgo carismático, que permita que los empleados sientan mayor compromiso y empatía con su ambiente de trabajo, para así elevar la productividad.


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